domingo, 17 de abril de 2016

LA HISTORIA DE UNA AMIGA

He dicho en varias oportunidades que prefiero dejar las cosas como están y por donde van. Esto porque es mucho más fácil decirlo que hacerlo.
Creo que el momento realmente ha llegado. No es por orgullo, es por AMOR. Ya se pasaron tantos limites que no tengo ninguno por cruzar. Estoy demasiado molesta con Dios, lo peor del caso es que mi molestia es por acciones que han realizado otros, solo me cuestiono porque fue capaz de permitir que me pasara a mi. 

He pasado por la prueba MÁS dura hasta ahora, es tanta la presión de la misma, que no he podido dejarla atrás. Y es muy difícil entenderlo para los demás, pero este suceso me ha robado toda mi esencia. Siento que me fue arrebatada la alegría, no sabia que era la depresión, pero ahora la conozco, es como tener cadenas invisibles en los tobillos, ha sido tal mi esfuerzo por querer escapar de ellas que solo tengo maltrato, pero no libertad. 

Me molesta vivir en una relación de apariencias, donde el amor cambio. Tal vez lleva el mismo nombre pero no se siente como antes. Ahora son más los momentos llenos de lágrimas que lo acompañan. Es difícil, por lo menos lo es para mí. Irónicamente lo tengo TODO, pero se siente como si no tuviera nada. Es increíble como las acciones de otros terminan arrebatándote la libertad de la que tanto predicas. Ya no predico, porque es tal mi decepción que incluso mi relación con Dios a cambiado. Es como si no escuchará, solo escucho mi eco. y mis fuerzas entraron en modo reserva. 

Aunque parezca que no he luchado, llevo desde casi 10 meses en una lucha interna que parece no tener fin. He intentado hacer feliz a tantas personas, y se que tengo el apoyo de muchas, pero es inevitable no tener la sensación de soledad. No estoy sola, solo que nadie conoce la intensidad de mi guerra, nadie lleva el escudo, ni la armadura puesta como yo. Y llego ese punto donde el camino se hizo demasiado largo y realmente me PESA. 

Lo admito, he intentado hacerme daño. Pero solo por esa estúpida sensación de estar en un guerra totalmente SOLA. Para mí es difícil afirmar eso. Porque va en contra de todas las cosas que he aprendido y predicado durante mi vida. Pero mi vida no es perfecta aunque así parezca. Y en esta lucha me acompaña un debate permanente donde mi FE todos los días es puesta a prueba.  
 Por los momentos es un hasta pronto. Necesito pensar con la razón, no con el corazón. 

Pd. No resuelvo preguntas, porque no hay respuestas.