Muchos la admiran y tal vez se desvelan, pero sigo
insistiendo que no hay cosa más admirable que una hermosa figura con luz
propia, ¿Pero qué digo? Ella tiene más que eso.
Puede parecer envidia pero realmente no lo es,
bueno, podrían ser celos.
Suelen decir que entre mujeres somos envidiosas, yo
no lo soy, cada quien tiene dones y virtudes que nos hacen ser únicos y a las
mujeres lo que son. Pero con ella suelo sentir celos, pero como evitarlos sí
siempre quiere ser el centro de atención y realmente sin mucho esfuerzo lo
logra.
Aunque no tenga la figura más anhelada por el
género femenino, consigue mil motivos para reunir a hombres, haciendo que
busquen excusas para apelar hasta una falsa fiebre amarilla y así faltarnos a
una cita.
En cierta medida también la he admirado, realmente
no es tan agraciada, pero tiene algo que hipnotiza. Mañana será otro día en que
la veremos, así como cada fin de semana, es ese tipo de cita que no se acuerda
pero se termina cumpliendo, digo la vemos porque a veces ni la evito.
Cuando ya damos por iniciado su espectáculo, porque
alegremente lo es, aunque muchos la odien, y en cierta medida se entre en una
disputa por ella, siempre la queremos de nuestro lado, bueno realmente no. Lo
que queremos es que esté a nuestro favor.
Cuando está ella podría ser un día normal, bueno
realmente lo es, pero logra ser la
excusa perfecta para vestirnos de amarillo y sufrir de ese tipo de fiebre que
no nos molesta, por el contrario nos da la satisfacción de poder pertenecer a
algo, y el orgullo de sentir que somos más que colombianos (aunque yo no lo
sea).
La bendita pecosa, nos ha dado alegrías y
tristezas, pero no es realmente culpa de
ella, es de quienes la manejan cuando están dentro de una cancha durante
noventa minutos o un poco más, tal vez si sea su error porque se enamora de la
suerte de un equipo, por lo que no hay nada que el cuerpo humano, oraciones
divinas o llamadas a chamán puedan hacer.
Mañana la veré, bueno la veremos sin falta, porque está casada con nosotros, en el
mundial frente a Brasil fue un amor imposible, pero decidió volver porque el
que persevera alcanza, ya lo conocen, será ese día en el que obligaremos a
cupido a que la deje dentro y enganchada en el arco contrario, para poder
sentir ese sabor delicioso de la revancha, porque aunque suene cansón, si fue
gol de Yepes.
Es muy interesante el tono femenino que le das al tema, hace que sea interesante para leer, sin embargo me parece que tarda mucho en llegar al punto importante, la ortografía y la redacción son eficaces y ayuda a entender, la única observación con respecto a ese tema es que se repite mucho la palabra: bueno.
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